La calidad de vida, evaluada por el National Eye Institute Visual Functioning Questionnaire-25 (VFQ-25), fue una medida de resultados secundaria. El VFQ-25 es una versión validada del Cuestionario de Funcionamiento Visual del National Eye Institute (VFQ) que mide el estado de salud de la visión en personas con enfermedades oculares crónicas, incluida la degeneración macular. Una diferencia de 5 puntos en las puntuaciones de las subescalas o las puntuaciones compuestas puede interpretarse como de trascendencia clínica.(3-5) El cuestionario VFQ-25 se realizó al inicio y en el posoperatorio. Los resultados demuestran que la implantación con el IMT mejoró la calidad de vida en esta población de estudio (pacientes con DMAE en estadio tardío y con una deficiencia significativa de la visión bilateral). La puntuación global media compuesta, así como las puntuaciones de casi todas las subescalas relevantes, alcanzó un nivel de trascendencia clínica. No solo se produjo una mejora en las subescalas específicas de la visión, algo que cabría esperar con una duplicación de la agudeza visual, sino que también hubo una mejora significativa en las subescalas de dependencia psicosocial de la visión, salud mental, dificultades de rol y actividad social. Los resultados indican que los pacientes son menos dependientes de los demás, están menos preocupados o frustrados por su agudeza visual, están menos limitados en sus actividades relacionadas con la agudeza visual, tienen más facilidad para visitar a los demás y pueden reconocer mejor las expresiones faciales.(1)